Hay quienes dirán que se trata de suerte, hay quienes dirán que no es más que pura casualidad, pero lo cierto es que el Real Madrid llega por segundo año consecutivo a la máxima competición europea. Lo hace tras haber superado las dos rondas eliminatorias y dejando sin opciones en el camino a equipos como el SK Sturm Graz de Austria, el Manchester City de Inglaterra, y como colofón, el Rosenborg de Noruega.

Desde el estadio Alfredo Di Stéfano de Madrid tomaban cita jugadoras y aficionados para sellar el billete a la fase de grupos de la UEFA Women’s Champions League. Y si echamos la vista atrás, en la memoria de todos queda aquel escabroso calendario de marzo o la recta final de la pasada campaña liguera en la que se puede decir «pudieron más las ganas que las fuerzas» y tirando de cabeza y corazón, finalmente alcanzaban el «objetivo Champions» en la última jornada.

Una larga travesía llena de protagonistas en la que resulta difícil destacar tan solo un nombre. Buscando a los responsables de los resultados — en plural— nos fijamos en el cuerpo técnico. Nos fijamos en Alberto Toril. El técnico cordobés ha sabido imprimir a la perfección la esencia del Real Madrid en un grupo de jugadoras del que ya se puede hablar como un equipo con gran personalidad. Exprimiendo el potencial de las más jóvenes, combinando estilos de juego adaptados a su rival o probando ideas nuevas en posiciones del medio campo — el ejemplo más claro: la navarra Maite Oroz sorprendiendo como pivote ofensivo — se ha ganado la confianza del madridismo que aspira a grandes títulos.

Con el silbato de la colegiada dio inicio un encuentro que no necesitó de minutos de tanteo. En la primera pelota que se puso en juego demostraron las noruegas sus intenciones de intentar darle la vuelta al resultado y rebajar la sentencia del partido de ida. Sin hacerse esperar demasiado y para sorpresa del público, se adelantaban las visitantes a escasos 7 minutos del comienzo con un centro llovido que Hansen puso para que Nautnes, con la puntera de su bota, tuviese simplemente que rozarla para meterla entre los tres palos (0-1). Le siguieron varias llegadas más por parte del Rosenborg y algún que otro acercamiento tímido de Esther y Athenea al área rival que se marcharon por encima del larguero. Desde el centro del campo, Toletti – antes de tener que ser sustituida por lesión – tuvo su oportunidad de igualar las tablas con el centro servido desde la banda derecha por Lucía Rodríguez, sin embargo, escasos centímetros harían que la francesa fallase al rematar el cuero desviándolo de su trayectoria.

Real Madrid CF. Gol de Athenea del Castillo.

Tras el paso por los vestuarios, el Real Madrid salió a jugar un nuevo partido. Dejando atrás las imprecisiones de los primeros 45 minutos y creando un juego mucho más vertical y dinámico, supieron mover con oficio el balón para adueñarse de la posesión y reescribir el guion del choque europeo. Sería en el 47′ y desde el extremo derecho, una vez más, cuando una extraordinaria Athenea del Castillo le ganaba la batalla a su par y metía un balón al corazón del área para que su compañera escocesa, Caroline Weir, rematase de primeras subiendo el empate al marcador (1-1). El baile no terminaría ahí cuando a escasos 10 minutos, la zaga merengue pondría tierra de por medio. Continuando con la buena dinámica que estaban manteniendo, una majestuosa jugada individual cargada de detalles técnicos de la cántabra levantaba los aplausos de la grada. Athenea recortaba a la defensa y se deshacía de la presión — con bicicleta incluida — encontrando el hueco por el que mandar un potente disparo por la escuadra dejando sin opciones a la guardameta noruega (2-1). Una asistencia y un gol enmarcaban el momento de brillantez de la joven jugadora a la que le llueven los halagos tras haber sido capaz de llevar el peso del equipo en tareas ofensivas durante toda la fase previa de Champions. La conexión cántabra-escocesa promete grandes momentos y pretende llevar a ambas jugadoras a lo más alto del reconocimiento en el panorama del fútbol internacional.

Finalizaba el encuentro con la victoria madridista y el billete sellado rumbo a la fase de grupos de la Champions League por segundo año consecutivo. El sorteo de grupos se conocerá el próximo lunes 3 de octubre a las 13:00 h.

Ficha técnica:

Real Madrid: Misa, Rocío Gálvez, Toletti (Teresa Abelleira, 39′), Maite Oroz, Esther (Nahikari, 76′), Weir (Freja Siri, 76′), Sousa, Lucía Rodríguez, Zornoza (Feller, 66′), Athenea del Castillo y Svava (Olga Carmona, 66′).

Entrenador: Alberto Toril.

Rosenborg: Christensen, Leine, Næss, Andreassen (Brønstad, 76′), Joramo, Olsvik, Jøsendal, Harviken, Hansen (Hørte, 66′), Nautnes (Negård, 76′), Magnúsdóttir (Minde, 62′).

Entrenador: Steinar Lein.

Goles: (0-1) Nautnes 7’, (1-1) Weir 47’, (2-1) Athenea del Castillo 60′.

Equipo arbitral: Rebecca Welch (ENG), Natalie Aspinall (ENG), Franca Overtoom (NED) y Emily Heaslip (ENG).

Aforo: 1.374 espectadores.

Fotografía: Real Madrid CF

UEFA WOMEN’S CHAMPIONS LEAGUE 2022/2023. Round 2. Real Madrid CF – Rosenborg BK. Estadio Alfredo Di Stéfano, Valdebebas, Madrid. 28 de septiembre de 2022, 20:00h.

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